#TEAacompañodesdeCasa

Queridos alumn@s,

Ya sabéis que el día 2 de abril se celebra el “Día mundial de concienciación del Autismo”.  Todos los años celebramos este día juntos en el centro, el año pasado hicimos un infinito gigante en el patio, ¿os acordáis? pero…bueno, este año no va a poder ser así.
Sin embargo, no queremos dejar de reivindicar este día tan importante con todos vosotr@s, por eso, os hemos pedido que colaboréis en la realización de molinillos de viento (las instrucciones para hacerlo las tenéis un poquito más abajo).
 Desde el centro, queremos acercaros cada día un poquito más, a la concienciación en la diversidad de las personas, al respeto y la empatía, pero este año no vamos a ser los profesores/as quienes os expliquen qué es el autismo, creemos que esa lección ya la tenéis más que aprendida.
Este año contamos con los maravillosos testimonios de dos alumnas y una de las familias que han querido expresar sus sentimientos a través de estas fantásticas cartas y así poder aprender un poquito más.

¡Gracias por compartirlo!

 Cristina Escudero (Integradora Social)

FAMILIA Y ALUMNA

NOSOTROS COMO FAMILIA CON NIÑA TEA, 

HEMOS DESCUBIERTO EL AMOR TAN INCONDICIONAL, 

TAN PURO, TAN CRISTALINO QUE 

NOS GUSTARÍA COMPARTIR CON CADA HOGAR DEL MUNDO UN PEDACITO DE ESTE SENTIR

"Cuando me siento enfadada y desesperada por todo, la música es la única forma de calmarme por dentro"

"No queremos estar solos, somos distintos pero somos como vosotros"

"Todos somos especiales, vosotros y nosotros"

Fdo: Míriam y familia

MI AUTISMO

El autismo es un trastorno psicológico que tiene las siguientes características: primera, intensa concentración de una persona en su propio mundo interior perdiendo el contacto con la realidad. Segundo, dificultad para comunicarse y relacionarse con otras personas. Tercero, hacer repetidamente un tipo de movimientos, acciones o actividades. Cuarto, no abrirse a otras personas tan fácilmente si no es preguntándoles. Y Quinto, percibir la realidad de forma diferente como la textura de la comida, los sonidos o la luz.

Bueno ahora que he contado las principales características del autismo, os contará su experiencia una servidora.

Para empezar diría que para mí, el autismo es esa burbuja que no sabes por qué está ahí, no la ves, la sientes, es como si por alguna razón cuando hablas con alguien sientes que estás a una larga distancia de esa persona y si es en un grupo pues sientes que chocas con otra burbuja y parece más difícil romperla. De hecho, hay veces en las que no hablas, sólo escuchas a los demás e intentas hablar con la persona que mejor te cae o que mejor conozcas para no perder el contacto.

Te metes en un mundo donde parece que la realidad pasa más deprisa que en tu mundo, no te aburres y piensas que es mejor estar allí que aquí, aunque puedes expresar estar en tu mundo a través de unos movimientos muy raros, que aunque los demás no quieran que los tengas, tú no quieres parar y podrías estar toda tu vida así sin ningún problema.

Pero lo cierto es que el autismo no es tan simple como lo piensan o como lo muestran en las películas o series, de hecho hay muchas personas que pueden ser prácticamente una persona normal pero que tiene sus pegas; otros que te hablan con normalidad pero que no te miran a la cara; otros que no saben gestionar algunas cosas como las vueltas del dinero en una compra, que piensen en explosiones pero que no son genocidas, otros que son super simpaticos pero te hablan en voz alta etc, etc y más etc. 

Cuando alguien ve a un autista en una serie, como Atípico, dan el perfil de un autista con muchas dificultades, dando a entender al espectador que todos los autistas son iguales y NO ES ASÍ. TODOS LOS AUTISTAS NO SON IGULES. De hecho, son muy diferentes, solo ven el mundo de otra manera, perciben las cosas de otra manera y se expresan de otra manera.

Yo, la verdad es que gracias al autismo tengo algunos “superpoderes” y algunas dificultades

O sea vamos a hablar sobre mi autismo para que me entendáis un poquitín mejor.

Soy una persona muy empática, QUIZÁS DEMASIADO EMPÁTICA. Siempre que he visto a alguien sufrir tanto en la vida real como en una historia, siempre me pongo en su lugar y siento que sufro y tengo la necesidad de ayudar a esa persona aunque muchas veces no sé qué hacer, es por eso que cuando veo a alguien llorando siempre lo abrazo (solo con las chicas, no lo hago con chicos por una palabra VERGÜENZA, a no ser que sea muy amigo mío).

No soy una persona rencorosa, siempre que me peleo con alguien se me pasa y me disculpo, aunque tengo que esperar un buen rato para que ya se le pase el enfado al otro. Intento que se le pase diciendo comentarios graciosos para que él piense ´´no es para tanto`` pero no consigo nada. Esa es una dificultad que tengo. A veces no sé cómo pedir perdón de forma adecuada.

Soy muy sensible con el tema del abandono, porque aunque no sé muy bien cuando soy una molestia, cuando las personas a las que consideraba mis amigas me evitan o dejan de lado ,me cuesta mucho recuperarme. O incluso cuando me gritan o se enfadan conmigo. Luego tengo pensamientos donde me hago daño a mí misma para sentirme mejor. De hecho ha habido momentos donde me he hecho daño a mí misma, o he tenido que golpear algo para sentirme mejor.  En esos momentos lloro, lloro mucho, a veces me gustaría no llorar nunca más. 

Tengo una baja tolerancia a la frustración, cuando algo sale como no quiero me enfado, me pongo a llorar y a ponerme paranoica. Luego se me pasa cuando escucho música o veo algo que me cambia el humor pero claro, esto no es más que un círculo en el que no avanzo nada y después de muchas charlas con mis padres, las tutoras y mi psicóloga, pues ya les está empezando a cansar. Mi psicóloga ya me ha enseñado muchas veces la curva de la frustración, tantas veces que hoy en la cuarentena se la ha puesto de fondo de pantalla para recordármela por si acaso.

No me gustan los sonidos altos y super agudos, pero puedo ponerme el 100% de volumen cuando escucho música en los cascos.

Cuando me aburro siempre me voy a mi mundo para entretenerme y así se me pase el tiempo más rápido. Siempre que voy de viaje a algún sitio, me pongo mis cascos y mi música y puedo estar así 8 h, eso sí,  nadie me puede hablar porque me desconcentro. Es por eso que cuando voy en autobús me gusta ir sola, pegada a la ventana porque también es cuando voy a mi mundo y no paro de mover la cabeza de izquierda a derecha.

Cuando me pongo nerviosa necesito ir al servicio o a algún lugar donde pueda soltarlo todo y no me pregunten continuamente si estoy bien.

Tengo muy baja autoestima, tanta que a veces pienso que es mejor ser la víctima de la que se apiaden y que me traten como un jarrón de cristal. Siempre ando culpándome por todos mi problemas y sintiendo pena de mi misma, en vez de enfadarme conmigo y avanzar.

Y he conseguido un montón de cosas. Me he pasado juegos que antes abandonaba, estoy aprobando 4ª de la ESO, he conseguido el cinturón amarillo de aikido, al tomar decisiones tengo un buen aguante y ¡he conseguido sacar un 6 en mates! 

Eso es todo.

Gracias por leerlo. 

E. M.G.